Las torres de calle RETOM se fabrican en dos versiones:
Electrificada y sin electrificar. La estructura que las componen es similar en los dos casos. Se diferencian en la
presencia de una barra electrificada en un lateral dotada de seis circuitos de 3,0 kW.
Para su conexión a la red de circuitos del centro se dotan de multiconector metálico Harting con el
número de contactos adecuados para el uso a que se destina.
Dispone de seis soportes para proyectores regulables en altura de fácil manipulación.
Las torres son autoestables mediante soportes inferiores desmontables. También disponen de gancho superior
para posibilitar su suspensión de la maquinaria y liberar así espacio en el escenario.
El acabado de las torres es a base de pintura al horno color negro mate, de gran resistencia al desgaste.
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